LA SECTA “My Sonic brother / Save my soul”_ Single (Banizu Nizuke)
El regreso a los escenarios del grupo bilbaíno y santurtziarra “LA SECTA”
se produjo en el 2017. Con la formación inicial al completo (Alberto, Patxi,
Txetxu y Gorka) tras 29 años desde su formación (1988) y 11 años desde su
separación (2006). La Secta acaban de ver editado un homónimo libro
biográfico escrito por Pablo Salgado y acompañado un nuevo sencillo, publica
Banizu Nizuke. Dos temas: “Save my soul”, bomba sónica más orientada a
sonidos 70s en una cara, y “My Sonic brother” en el reverso, antigua canción
instrumental que ahora cuenta con aportación vocal de Gorka y rinde tributo
a una serie de caídos en combate con los que compartían filosofía musical
aussie. Entre ellos, Spencer P. Jones y Tony Pola de Beasts of Bourbon y,
especialmente, su compañero Brian Henry Hooper, un auténtico hermano sónico
para ellos. Produce Martin Guevara de Cápsula con su habitual solvencia. Vio
la luz en Marzo de 2022
La dirección de arte corre a cargo de Gorka, además de vocalista de La
Secta ilustrador de unas cuantas referencias de la banda, asi como unos
cuantos artes desde la época de La Herencia de los Munster a principios de
los 80. Me transmite La idea de portada, Brian Henry Hooper (bajista de las
Bestias del Bourbon fallecido hace 4 años) en el onírico contexto de una
silla clásica asentada sobre una superficie lunar, muerta y plagada de
cráteres, de la que solo se ve parte de la mitad superior del satélite. El
interfecto calza zapatos de gangster, pantalón rayado de traje y camisa
blanca, impenetrables gafas de sol en su característico rostro enjuto. A sus
pies una botella de Jameson, su whisky preferido, un chupito en una mano y
la otra acariciando el mástil de su inseparable bajo. Del cigarrillo se
escapa una nube, calada sobre el fondo toma forma de una calaverita fantasma
de despedida.
Fondo sideral estrellado con una especie de nebulosa en medio que cruza
horizontalmente y sirve como asiento a los dos rótulos manuales de ambos
títulos en los flancos. Calado en la parte superior va el rotulo de La
Secta, customizado ligeramente a partir del original para adaptarlo
exprofeso al hueco. El resplandor espectral que lo envuelve va mas allá de
la solución estética de traerlo a un primer plano respecto del oscuro fondo,
es como dice Gorka una manera de materializar la luz que irradiaba, Santo
Brian del Bourbon!!
Las 2/3 partes de la contra van ocupadas por una foto en directo de esta última época, disparada en Helldorado por el gran JUXE (Jose A. Areta Goñi). Ligeramente tramada y girada, roturas a lo largo del contorno y marcas de desgaste. La parte de info en el tercio inferior sigue una linea de lo más minimal: créditos de participación, los temas sin indicar cara y la dedicatoria a los caidos.
Impresión monocroma azul sobre una base de cartón gris industrial
Las galletas, en sobrio blanco y negro, sobre un fondo nocturno estrellado cala el logo de Banizu Nizuke en la parte superior contrapuesto al logo de La Secta en la inferior junto al titulo del tema correspondiente + timing. En los laterales los RPM y referencia editorial (único emplazamiento, ya que en la carpeta se decidió que no figurara (?). En el otro costado las letras de cara como A y Z, última del abecedario.
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DRÁCULA YE-YÉ / Caperucita Ye-Yé _ Single (Munster Records)
Por fin! el deseadísimo y divertido ‘Drácula Yeyé’ de Andrés Pajares se
reedita en single de vinilo de manera oficial por primera vez en Marzo de
este 2022. La versión grabada por la banda Doctor Explosión en los años 90
ayudó a popularizar esta canción que ya ha alcanzado el estatus de santo
grial del garage-yeyé cantado en español. Y la cara B contiene otro temazo
rotundo: el ‘Caperucita Yeyé’ grabado por una especie de all-star band del
yeyé en español: Marta Baizán, Miguel Ríos y Los Impala. Dos buscadísimos
temas de garage-yeyé en español reunidos en un mismo single, imprescindible
para amantes de los sonidos 60s.
La portada del original, un EP editado por Regal en 1968, presenta una
composición fotográfica con un primer plano del muslamen de una moza yeyé,
mientras que de la oscuridad del fondo emerge la figura del propio Andrés
Pajares ataviado de conde Drácula, mostrando colmillos y clavando la mirada
sobre su presa. La idea para esta doble portada es adaptar la gráfica del
“Dracula Ye-ye” al registro de ilustración de la ya existente “Caperucita
Ye-Yé”. “Caperucita Ye-Yé” fue publicado por Sonoplay en 1966 dentro de una
serie dirigida al público infantil. Sonoplay estaba vinculada a Estudios
Moro (encargados de dibujos animados y los más destacados spots
publicitarios desde mediados de los 50 en nuestro país) con lo que el
artwork sale de ahí, pero no he podido confirmar la autoría del dibujo,
siendo probablemente el tipico “curro de machaca” sin firmar de uno de los
dibujantes del estudio.
Volviendo al planteamiento del “Dracula Ye-ye” a ocupar su cara
correspondiente: tomar los elementos de la portada original, la chavala y el
vampiro, en sustitución de la caperucita y el lobo. Optamos por ocupar el
espacio de la Caperucita con un par de chavalas sixties (no una), también en
la estética “cabezona” de Estudios Moro, pero más estilizadas y femeninas,
además de pertrechadas con los complementos clásicos: ristras de cabezas de
ajos, estaca, candil… Mientras que el Drácula viene como de empalmada de una
noche de juerga, descamisado, ojo morado, sin una “perra” en los bolsillos y
con el toque ibérico del pitillo y la copa de coñac. En definitiva, sigue la
estética y factura infantil de mitad de los 60s pero con un contenido algo
más adulto.
El registro manual de la Caperucita original es casi seguro que sean ceras,
mientras que para el Drácula prefiero tirar más a lo seguro por lápices de
colores sobre un papel de acuarela de grano grueso, no es exactamente el
mismo acabado, pero se le asemeja.
Cromáticamente sigue también la misma distribución, mientras que en las
chicas se concentra una mayor parte de colores cálidos y brillantes, rojo
sobre todo, la paleta del Drácula es más fría con predominio de azules y
violetas, como en el caso del lobo. La masa de fondo no es un blanco
nuclear, tiene una ligero tono amarillento vintage (el mismo aplicado a la
otra de Caperucita, también como recurso para uniformizar)
Detalle de diseño, añadido una vez queda acabada la ilustración, es el logo
de Munster falseado con la tipografía y óvalos concéntricos de Sonoplay
(misterio es el corte de las “r” cuando se envió todo a imprenta convertido
y acoplado…(?)
Ve la luz primeramente un preorder con la rotulación de portada en rojo, para una vez agotado dar paso a una segunda edición en que esa misma rotulación cambia a azul.
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